Hoy, desde el Lejano Oriente, no me puedo sustraer a una noticia que gracias al milagro Internet he leído en el diario español Expansión. Cunde la alarma en el sector hotelero internacional porque las ventas del pasado trimestre se han desplomado de manera escandalosa. Las grandes cadenas son las que máas lo notan, y el turismo vacacional sobre el urbano.
Para quien ya ha cruzado el desierto de varias crisis económicas todo suena ya a un déjà vu. Desde que la Humanidad abandonó la cueva y se puso a sembrar ha habido momentos críticos que harían sonrojar a los agoreros de hoy. De modo que algunos ya estamos curados. ¿Es, pues, diferente este bajón económico de los anteriores? El tiempo lo dirá.
Un análisis de las anteriores crisis nos enseña que la forma más rápida de remontar la corriente es mediante el esfuerzo y la imaginación. Si alguien tiene otra propuesta más iluminada, que lo diga. Esfuerzo e imaginación son las claves que sustancian los debates de este Foro de la Ruina, de modo que si tú, lector y partícipe, te quedas seco sin saber qué escribir aquí -siempre que seas un lector asiduo, claro está- es que estás en crisis. Y, a partir de ahora, sólo irás a peor. Si piensas que tienes la pócima mágica y no se la quieres revelar a nadie para beneficiarte tú de ella, esta crisis te matará.
A mí no me cabe ya la menor duda de que la situación económica actual se saldará con innumerables víctimas hoteleras. Como tampoco que la tabla de salvación será la reflexión sobre los hoteles que tenemos y cómo, mediante estrategias comunes, el océano rojo de la competencia sin sentido se tornará un océano azul de competidores basados en la diferenciación personal y no en la apropiación a cuchillazos de la clientela ajena.
Lo he subrayado varias veces: no compitas por ser mejor, compite por ser diferente.
Fernando Gallardo, con la postdata de lo publicado hoy en Expansión:
El fuerte recorte de gastos de las empresas hunde el sector hotelero
Publicado el 11-11-2008 , por Y. Blanco
El fuerte recorte de gastos acometido por las empresas para intentar contener la caída de sus resultados amenaza con paralizar un sector hotelero debilitado tras una floja temporada de verano. Las cadenas que operan en el segmento urbano y vacacional han visto cómo se esfuma la posibilidad de que el frenazo registrado en el turismo de ocio se compensara con el de negocios, mientras que las puramente urbanas ha girado hacia una política conservadora y han congelado sus movimientos en el tablero.
La última muestra de que el sector hotelero no es inmune a la crisis económica han sido los resultados de Sol Meliá, primera cadena española por habitaciones, al cierre del tercer trimestre. La compañía controlada por la familia Escarrer ganó, hasta septiembre, un 41,7% menos (de 137,1 millones pasó a 80 millones) frente al mismo periodo de 2007.
Retroceso
Los ingresos cayeron un 3%, hasta 991,7 millones de euros, mientras que el ebitda (resultado bruto de explotación) decreció un 18,6%, hasta 220,8 millones, frente a los 271,4 de septiembre de 2007.
Sol Meliá alega que el retroceso, que se mantiene en línea respecto al segundo semestre del año, en el que beneficio neto cayó un 41,1%, se debe a factores como la caída de las reservas del mercado británico y el español durante el verano o la ausencia de plusvalías por la venta de activos debido a la restricciones de acceso a la financiación.
Las buenas noticias llegaron del parqué, donde Sol Meliá logró colarse en el top ten de empresas más alcistas, al incrementar el valor de sus títulos un 1,05%, hasta 3,85 euros, debido a que sus resultados superaron ligeramente las previsiones de los analistas. No obstante, el valor de sus títulos ha caído un 63,05% en lo que va de año, por encima del índice (con un 41,36%) y a la par que su rival, la también cotizada, NH Hoteles, que cerró el tercer trimestre con una caída del beneficio del 63,1% y cuya cotización ha retrocedido un 56,97% en 2008, hasta 5,25 euros.
En adelante, se impone la mesura. NH ya ha cerrado el grifo a la inversión y Sol Meliá admite el impacto en sus cuentas de la disminución de los viajes de negocios, que prevé continúe en 2009. En Latinoamérica, la ralentización de la demanda de los mercados de EEUU y México, y las reservas de última hora podrían afectar a la rentabilidad de la gestión en la región.
La firma mantiene el recorte a la inversión que había previsto para este año de 300 millones a 200 millones, la rebaja a 100 millones para 2009 y previene de que, para 2010, todo dependerá de lo que suceda el año próximo.
Reforma aplazada
La preocupación cunde en todo el sector y ayer, durante la presentación de la Semana Mundial de la Iniciativa Emprendedora, organizada por el IESE, Ernst & Young y Junior Achievement, el presidente de AC Hotels, Antonio Catalán, desveló que hemos sufrido bajadas del 10% en septiembre, octubre y noviembre y añadió que se acabó la fiesta en España. Mientras, el Grupo Barceló advierte que 2009 es una incógnita y que no está teniendo problemas para conseguir financiación, aunque más cara.
En el plano internacional, InterContinental, la mayor hotelera del mundo por número de habitaciones, ha dado la voz de alarma. La cadena británica aumentó su beneficio un 14%, hasta 150 millones de dólares (117 millones de euros), pero constató un importante deterioro en octubre y prevé un difícil 2009, informa hoy Financial Times. Por su parte, Orient Express ha aplazado el cierre por reformas que había previsto para el hotel Ritz de Madrid a finales de año, debido al panorama económico actual.