Desde que emprendimos los encuentros hoteleros en La Ruina Habitada y, más tarde, este debate abierto que propone nuestro Foro todo el mundo percibe que estamos definiendo las tendencias de la hotelería y el turismo para los próximos años. No es nueva la iniciativa. De algún modo ya lo veníamos pregonando desde principios de los 80, cuando diseñamos un modelo turístico pionero en el entorno rural, como fue el proyecto Taramundi, en Asturias.
Luego nos inventamos la denominación Hoteles con Encanto®, cuyo impacto a través de la popular guía de Hoteles con Encanto definió un nuevo concepto que ha sembrado el país de negocios familiares sobre el yermo de una agricultura y una ganadería en retroceso. Tanto en la experiencia Taramundi como en la de los hoteles con encanto supimos adivinar las transformaciones culturales, sociológicas y económicas de los españoles, protagonistas del cambio turístico que ha quebrado definitivamente el atávico binomio sol-playa en España.
Y ahora, por las mismas, vislumbramos y lo comunicamos enseguida otro cambio de mayor envergadura en la redefinición del espacio y sus usos como motor de un nuevo turismo basado en las emociones y no en el consumo de un metro de arena o dos metros de cama. Estamos definiendo ya las bases ideológicas de los hoteles de los sentidos y el turismo experiencial.
Subidos a la cresta de este tsunami estamos los que queremos, más que sabemos, otear el horizonte para ver más lejos Adivinar lo que hay detrás de las nubes Percibir los infratonos y los ultracolores Nadar en otras playas, surcar los desiertos próximos y también los lejanos Porque somos incorregiblemente curiosos y emprendedores impenitentes. Todos, absolutamente todos los que aquí estamos.
Y la prueba palpable de que osamos a ser penetrantes en el traspaso de lo convencional se observa desde hoy mismo en Fitur 2010. Todos los países, comunidades autónomas, diputaciones, ayuntamientos y los distintos empresarios del sector pugnan en esta feria por mostrar un pequeño fotograma de sus productos turísticos. Desde los distintos stands se nos ofrece aquello que bien parece ser un calco conceptual de lo ya visto, una fotografía del mismo paisaje. Armazones, imágenes y contenidos que forman el común denominador de al menos el 80 % de los expositores. Bien podríamos intercambiar esas instantáneas sin que el discurso del anunciante se viera alterado. ¿O no?
Estructuras presostáticas Volúmenes levitantes y aparentes desde un artilugio superior Tiendas canadienses caleidoscópicas Ristras de leds Vatios a raudales Hasta que llegamos a un stand oficial de una comunidad autónoma que ya desafió el año pasado todo lo visto y aceptó realizar una incursión en la Arquitectura de los Sentidos, donde el espacio no es solo espacio y donde las sensaciones requieren una espacialidad en constante reinterpretación. Sí, esta autonomía radikal es Castilla y León, cuyo entusiasmo por la innovación le hizo confiar en el arquitecto Jesús Castillo Oli el diseño de su stand. Nuestro alarife de cámara subvirtió el concepto archimanido de un stand enmarcando el espacio desde su cubrición. Quien estuvo en la pasada edición de Fitur recordará, sin duda, esa techumbre vibrante de flecos colgantes que se irisaban y fulguraban gracias al aire ascendente que generaba el público en movimiento.
Stand de Castilla y León en Fitur 2009
Pues bien, el impacto fue tan notorio que este año volvemos a ver en tecnicolor tales placas colgantes en los stands de Madrid y de Baleares diseñados por otros arquitectos seguramente entusiastas de la obra e imaginación de Castillo Oli, sufragados con aún mayor entusiasmo por los responsables turísticos de ambas comunidades, a todas luces fans de nuestro arquitecto y de todos los conceptos propuestos desde este Foro. Nos felicitamos mucho por ello, pero sobre todo felicitamos a las regiones mencionadas por estar a nuestro lado, que es el lado de la innovación, el derroche de imaginación y la subversión de lo ya manido con la convicción de que el turismo español solo podrá salir de su crisis mediante una reconversión radical de todo lo que es y representa.
Stand Baleares en Fitur 2010 – Stand Madrid en Fitur 2010
Ideas nuevas es lo que a veces falta. Y por esto tenemos este Foro y su Clúster siempre en marcha. La nueva propuesta de Jesús Castillo, ya lo comentamos hace unos días en el artículo No stand!, presenta en la actual edición de Fitur un nuevo concepto de espacio expositor, o de no espacio, donde el perímetro, las paredes y el aire no existen más que en el fluido de la gente en movimiento. Un ejemplo transgresor de lo que es la arquitectura efímera del stand puesto en marcha gracias al sentido innovador de la Junta de Castilla y León.
En la próxima edición de Fitur 2011 veremos seguramente este modelo aplicado en los stands de otras comunidades autónomas. ¿Quizá las de Madrid y Baleares otra vez?
Fernando Gallardo | 
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